Finalizado el Congreso, se ha fundado la Confederación Internacional del Trabajo, asociación internacional que englobará el anarcosindicalismo y el sindicalismo revolucionario. Son parte USI (Italia), FAU (Alemania), CNT, IWW (Norte América), ESE (Grecia) e IP (Polonia), además de que organizaciones de Brasil, Holanda, Bélgica, Francia y Reino Unido, entre otros países, han mostrado su interés en participar.