28/07/2023

Perspectivas de los cuidadores en salud y enfermedad mental

Escrito por Kimalbertos

Escrito por Kimalbertos

No me gusta la palabra “loco"

 

La definición de lo que es salud mental y enfermedad mental, desde el punto de vista científico, un difícil problema técnico(1) que sólo se resuelve cuando el entorno familiar descubre, de forma subjetiva, que el comportamiento de la persona en cuestión es algo más que algo pintoresco, o peculiar. Sobre todo porque la persona en cuestión, demuestra un alto grado de sufrimiento, que es el parámetro principal para la posibilidad diagnóstica mínimamente sería, aparte de la cuestión peliaguda de que alguien con autoridad jurídica, apoyada en una autoridad psiquiátrica, dictamine que es un peligro, tanto para sí mismo, como para los demás. En este artículo no vamos a ver los problemas de control social y político sobre las personas que son institucionalizadas como “enfermos” por cuestiones de disidencia política, social, económica o cultural. Ya hay otros escritos que lo abordan de manera inteligente, creativa y radical (2).

Por motivos personales, este tema es algo más que un tema puntual, o anecdótico a lo largo del recorrido de una vida como la mía. Me veo en la obligación moral de escribir este artículo que busca la difusión comprensiva del fenómeno.

Cuando aparece, normalmente de forma abrupta, en la mayoría de los casos supone un impacto para el entorno tan brutal, tan devastador, que cambia sustancialmente, no sólo la vida de la persona con enfermedad mental, sino la de su entorno, tanto a nivel social como familiar.

La salud mental es, en términos generales, el estado de equilibrio entre una persona y su entorno sociocultural que garantiza su autonomía, participación laboral, intelectual, las relaciones para alcanzar un bienestar y una buena calidad de vida; un estado de completo de bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades. La importancia de la salud mental se establece en el hecho de que para abordar una buena salud física, es previa aquella, en una interacción entre salud mental y salud física. Por eso, debe haber un previo concepto de higiene mental, de una vida equilibrada entre mente y cuerpo.

Los conceptos de “salud mental” y “enfermedad mental” no son opuestos, es decir, la ausencia de un desorden mental reconocido no indica necesariamente que se goce de salud mental y viceversa, sufrir un determinado trastorno mental no constituye siempre y necesariamente un impedimento para disfrutar de una salud mental razonablemente buena. En ese espacio y tiempo de las relaciones interpersonales, es donde el comportamiento aparece como concepto subjetivo, pero evidente de un cuadro de síntomas de que algo en su mente distorsiona una manera de vida independiente en un entorno culturalmente determinado. Entendiendo que esa distorsión no es total sino parcial, es obligación de nosotros, los cuidadores, potenciar aquellos aspectos psicológicos sanos que proporcionen a la persona con enfermedad mental, su propia toma de decisiones.

En este sentido, hay que entender el impacto de la enfermedad mental sobre la persona y sus cuidadores altera, no sólo aspectos de la vida real (ingresos voluntarios o no, incidencias jurídicas y/o policiales, recaídas, conflictos, agresiones, etc……), sino que la percepción de la Realidad se altera para siempre, y ya nunca más vuelves a tener una vida “normal”, signifique esto lo que signifique.

Este artículo se irá publicando en una serie de bloques o partes, sobre el tema y sus distintas perspectivas o puntos de vista sobre las personas con enfermedad mental, sus cuidadores y sus relaciones con el resto de la sociedad.

 


(1) Ni la O. M. S. (Organización Mundial de la Salud), ni otras instituciones supranacionales o internacionales del sector, admiten que son incapaces de aportar definiciones universales, que en otros campos de la medicina si se dan. Esto se da porque las diferencias políticas, sociales, religiosas, etc….. son de tal magnitud, que impiden cualquier acercamiento en la definición.
(2) ENAJENADXSSALUD MENTAL Y REVUELTA 2010. pedaleadorxs del infierno ediciones. Buenos Aires.