22/04/2022

COSAS DE HERBOLERAS Y FEMINISMO

Escrito por La Prima de Emma

Siempre me ha interesado mucho lo mitología y en concreto la vasca. He leído mucho sobre jentiles, lamiak, basajaun, galtzagorriak, akerbeltz, Mari y como no, nuestras históricamente conocidas y perseguidas “Sorginak” o más bien “Herboleras”. Parece ser, que para pasar de ese mundo mágico había que pronunciar estas palabras:

Uno, dos, tres

cuatro, cinco, seis,

siete, ocho, cuervos,

arma, tiro, pum!

Xirristi-mirristi!

asador, plato,

sopa de aceite,

caldo de pollo,

bebe de golpe o traga…

Ikimilikiliklik

 

Según los cuentos e historias, la propia inquisición estas supuestas villanas eran, feas, solitarias, envidiosas viajaban en escoba y tenían poderes mágicos-malignos. Sabemos, que estas “Sorginak” fueron mujeres de carne y hueso a las que difamaron, persiguieron, torturaron y quemaron en las hogueras.

Fueron quizá, las primeras feministas de la historia, ya que las persecuciones a las cuales fueron sometidas tenían que ver con sus conocimientos de medicina, sus trabajos como parteras y enfermeras todo ello ligado al poder de las plantas medicinales, su forma de vida mas “hereje”, sus creencias y, sobre todo, que no veneraban al sistema religioso-patriarcal. Este uso de plantas medicinales fue lo que muchos historiadores acuerdan el motivo de la “caza de brujas”. Estas mujeres generadoras de conocimientos, suponían un peligro para la superioridad masculina ya que se creía que las mujeres no debían alimentar su intelecto y se les relacionaba con alianzas con fuerzas malignas, no es increíble ¿? Por ello, cualquier mujer libre-pensadora y empoderada era tratada como bruja. Ellas fueron las primeras en luchar contra lo establecido se puede decir que fueron las primeras feministas de la historia.

Se calcula que con la peste negra murió un 30% de la población y con ello, cayo el sistema feudal. Con el fin de repoblar, se predicó la procreación sin límites como un deber ante Dios por parte de la iglesia. Es así como la mujer quedó sometida al “trabajo” de procrear y como consecuencia de ello, las parteras, enfermeras, curanderas y herboleras comienzan a ser perseguidas y acusadas de brujería por intentar curar el cuerpo y el alma, según ellos, algo reservado sólo a Dios.

Esta cacería no sólo surge de creencias religiosas, sino de instaurar un nuevo orden social y modelo económico: el capitalismo. En esta transición, las mujeres quedan recluidas al entorno doméstico con un fin en particular, la procreación, sometiendo el cuerpo de la mujer al control del nuevo Estado. Todas aquellas mujeres que no cedían ante tal sometimiento, eran criminalizadas tan sólo por querer tener el control de su sexualidad y cuerpo y querer ayudar a otras mujeres y así poco a poco la historia convirtió en “Sorginak” a estas mujeres y les adjudicaron poderes malignos para justificar las persecuciones. En Europa eran quemadas en las hogueras, en Inglaterra y Estados Unidos se las ahorcaban.

Esta cacería del sistema patriarcal, impuso modelos de feminidad que se parece más bien a las princesas de cuentos que a las brujas. Su supuesta salvación consistía en la espera de su príncipe azul, De este modo, la mujer quedaba en un plano sumiso y pasivo. Este proceso de persecuciones, quemas, “juicios” y torturas dio lugar a una mujer sometida y recluida al hogar, sumisa,”pura” y de familia.

Esta caza de brujas, continúa hoy en día y tristemente se acrecienta con la extrema derecha, para ellos, deberíamos vivir en un sistema piramidal, primero dios, seguido el rey después el padre y finalmente el marido. Un sistema de poder donde las mujeres y niñas/niños son las débiles y si alguna no obedece y decide bailar, se derrumba todo el sistema, por eso, hay que seguir, “jo ta ke irabasi arte”. Los antiguos Akelarres son ahora los grupos feministas, somos brujas por pedir un país donde podamos caminar solas por la calle, por pedir libertad por demandar que no se nos trate como objetos. Hoy en día se escucha eso de “somos las nietas de las brujas que no pudiste quemar” con esto queremos revindicar la figura de “Sorginak” como mujer libre, pensadora e independiente y así recordar a todas las mujeres perseguidas por todos los tiempos. No podemos reescribir el pasado pero si redireccionar el presente. Gora Emakume Feministak ¡!