Tras la protesta de hace algunas semanas, en la que CNT había “amargado el desayuno” al presidente de Confebask, Miguel Ángel Lujua –quien había acudido a este hotel para dar una conferencia-, la organización anarcosindicalista tenía previsto demostrar su malestar ante el lehendakari. Sin embargo, “Urkullu ha preferido no tener que desayunar con las banderas y las consignas de este sindicato”, ha destacado la central anarcosindicalista.
En efecto, CNT ha recordado que lleva varios meses luchando contra las medidas antiobreras de esta cadena hotelera, que pretende “reducir al máximo los derechos de sus trabajadoras y trabajadores, empeorando sus condiciones laborales”. “A pesar de ello –o quizás por eso mismo- Urkullu tenía previsto venir a este hotel a ofrecer sus recetas contra la crisis: recortes para la clase obrera y apoyo sin reservas a la patronal vasca”, ha destacado.
“Más allá del color de la bandera o del nombre del presidente –ha subrayado CNT-, todos los gobiernos son aliados incondicionales de los empresarios, a quienes suelen realizar los trabajos sucios. Hoy se llama Iñigo Urkullu, ayer se llamó Patxi López y mañana tendrá otro nombre, pero nada cambiará”. Frente a esa realidad, la central anarcosindicalista ha llamado a luchar “contra todos los poderes que quieren convertir a los trabajadores en esclavos dóciles y sumisos”.
En tal sentido, CNT ha añadido que “las movilizaciones contra los ataques a la clase obrera en Hoteles Ercilla continuarán hasta que sus jefes revean sus medidas. Mientras esto no ocurra, seguiremos amargándole el desayuno a sus amigos”.