En Barcelona, los manifestantes recorrieron varias calles de la ciudad detrás de una pancarta en la que podía leerse en catalán “solidaritat vaga general a Euskal Herria” (“solidaridad con la huelga general en Euskal Herria”). Bajo ese mismo mensaje se realizó una concentración en Ontinyent y en Valencia, donde los manifestantes se concentraron fuera de un supermercado del Grupo Eroski.
Una de las movilizaciones de apoyo más numerosas tuvo lugar en Madrid. Bajo el lema “Contra el pacto social: lucha y huelga general”, la capital española acogió una manifestación en la que participaron todas las organizaciones que componen el Bloque Unitario, entre las que se encuentra este sindicato.
En esta misma ciudad, la Federación Local de Sindicatos de CNT realizó una manifestación que partió de la calle Atocha y transcurrió en un ambiente combativo, entre consignas a favor de la huelga indefinida y la lucha de clases. Los manifestantes también exigieron “la inmediata puesta en libertad de todos los presos anarquistas y el derribo de los muros de las prisiones”, en referencia a la escalada represiva que se ha dado en los últimos meses. Tampoco faltaron las clásicas proclamas contra toda forma de gobierno y dominación, así como llamamientos a la clase trabajadora a organizarse y luchar sin líderes ni subvenciones.
“La fuerza obrera: solidaridad – acción directa”, señalaba la pancarta que portaron en Logroño, donde también hubo una concentración en respaldo de la huelga en Euskal Herria. En Compostela, los militantes gallegos de CNT mostraron su repulsa a los recortes de derechos y a la reforma laboral, mientras que en Salamanca reivindicaron el anarcosindicalismo como forma de lucha.
En Valladolid, varios militantes de este sindicato se reunieron bajo una consigna rotunda: “Ni un paso atrás. CNT con todas las luchas obreras”. También hubo reivindicaciones y muestras de solidaridad en Zaragoza –donde los manifestantes portaron una pancarta en la que se leía “basta de huelgas domesticadas y despidos salvajes-, Huesca y Cartagena.
“Por encima de fronteras, partidos y banderas, todas y todos los trabajadores sufrimos un mismo mal: el capitalismo y sus nefastas consecuencias”, ha destacado CNT. Por ese motivo, la central anarcosindicalista, “fiel a sus principios y tácticas, considera que el apoyo mutuo y la solidaridad entre la clase obrera resulta fundamental para luchar contra este sistema”.