Las patronales CEOE y CEPYME, junto a las centrales sindicales CCOO y UGT han dado a conocer el preacuerdo en el marco del Acuerdo Estatal de Negociación Colectiva (AENC), que pasará a ser ratificado por los cuatro agentes.
La valoración que se hace desde el sindicato CNT es negativa. En el ámbito salarial, se queda muy lejos de recuperar lo perdido durante la crisis. En lo que corresponde a la negociación colectiva, se intenta desmontar las movilizaciones y huelgas para mejorar los convenios. Sobre la subcontratación, dan por buenas las razones que puedan esgrimir las empresas. Sobre la brecha salaria de género, ni siquiera la aborda superficialmente. Lo que, en palabras de la organización sindical, “pone en valor nuestro modelo de negociación colectiva, que busca romper estos límites mediante las negociaciones empresa por empresa”.
Salarios
El preacuerdo habla de una subida salarial del 2% más 1% variable; sin embargo, “en términos reales, esto es, comparado la capacidad adquisitiva, queda mucho para recuperar el poder de compra previo a la Gran Recesión de 2008, lo firmado son migajas”. Como ejemplo, un informe de FUNCAS decía que los nuevos contratos firmados en 2015 conllevaban una reducción de ingresos de casi un 12% en comparación con los firmados en 2008. “Es más, desde CCOO ya saben que lo que han firmado no es ningún aumento”, ha subrayado la organización anarcosindicalista: según los propios técnicos de CCOO, el recorte medio real (descontada la inflación) en las nóminas –esto es a una misma empleada por el mismo trabajo– ha sido del 7,6% entre 2008 y 2015.
También hay que tener en cuenta que se ha desligado la subida salarial de la inflación. “El IPC mide el aumento del coste de la vida, generalmente de una manera conservadora”, ha dicho CNT, “y aún así estas centrales sindicales han desligado la subida salarial a la del IPC”. Según la central anarcosindicalista, esto es un riesgo para los salarios, ya que es más que probable que “el coste de la vida aumente, debido a la imprevisibilidad de este índice”.
El preacuerdo también incluye un salario mínimo de 14.000 euros (1.000 euros al mes, que el acuerdo no detalla si son brutos o netos). Una cantidad “insuficiente para poder vivir a día de hoy”. Con el uso fraudulento que las empresas hacen de los empleos a tiempo parcial, “pueden saltarse su aplicación”, ha dicho CNT. “Es una medida habitual en las empresas", la contratación parcial es el día a día, cuando suplen puestos de trabajo a tiempo completo. Además de no hay "un control real de las horas extras por parte de Inspección de Trabajo, sumado a que muchas veces ni se pagan”, ha detallado la organización anarcosindicalista, "elementos clave para entender la parcialidad en los contratos".
Negociación colectiva
Dentro de la negociación colectiva, estas centrales “dan un paso más a la hora de coartar medidas como la huelga y las movilizaciones”, ya que en este preacuerdo, que tiene como objetivo ser la base de los nuevos convenios y los que se renueven, posibilita que una de las partes puede decidir que la negociación está agotada y, por tanto, instar la mediación obligatoria o el arbitraje voluntario.
Subcontratación
“Los sindicatos firmantes profundizan en la subcontratación, yendo de la mano de las patronales pidiendo otra reforma del artículo 42 del Estatuto de los Trabajadores”, ha señalado CNT, cuando la apuesta ha de ser por la contratación directa por parte de las empresas, según la organización sindical.
Da por buenas las causas que la empresa pueda dar para subcontratar, “cuando en las negociaciones en las que estamos observamos día sí día también como las empresas engañan respecto a las causas que plantean”. Además, el preacuerdo profundiza en la flexibilidad interna (que todas hagamos de todo), algo con lo que “cualquier central sindical que pretende defender los derechos de las trabajadoras ha de estar en total oposición”.
Brecha de género
Por último, pero no menos importante, este nuevo AENC trata la igualdad “de una manera insuficiente”, según CNT. “Este 8 de marzo tuvimos una movilización histórica, y estas centrales ignoran por completo lo que se exigió”. Sólo plantean elaborar un estudio midiendo el impacto de género en los pluses y una equiparación de los permisos de paternidad, entre otras cuestiones. “No abordan ninguna problemática real en el ámbito de la igualdad”, ha dicho el sindicato, “se queda en meras medidas de maquillaje”.
No aborda ninguna medida concreta que elimine la brecha salarial ni la discriminación por causa de genero, “algo realmente grave”, ha denunciado la CNT.
Cómo hacer frente a este tipo de acuerdos
La organización anarcosindicalista, con este tipo de acuerdos, ve reforzado su modelo sindical, que “apuesta por la negociación en el ámbito empresarial, sin abandonar la pretensión de que en un mismo sector se den unas determinadas condiciones de trabajo generales”, donde se pueden superar estos estrechos márgenes que las patronales estatales y las centrales del pacto social “nos dejan en la negociación colectiva”.
Podéis consultar el preacuerdo aquí.