La libertad de expresión es un derecho básico que no puede ser pisoteado en ningún caso.
Estamos viviendo en los últimos tiempos un grave retroceso en este campo. En demasiadas ocasiones estamos asistiendo a situaciones en las que se cercenan las libertades básicas en favor de los sectores más retrógrados de la sociedad.
Es inaceptable que se pongan límites al humor, la crítica y la sátira a golpe de auto judicial e intervención policial, al más puro estilo de los regímenes totalitarios.
Queda demostrado con estos lamentables hechos el poder que aún ostenta la Iglesia católica en el Estado español, lo que nos recuerda a tiempos pasados, que a la vista de los acontecimientos, no han sido superados.
Toda nuestra solidaridad, cariño y cercanía hacia las personas que forman la comparsa Hontzak, que han sabido responder con más humor al ataque recibido.
Todo nuestro desprecio hacia las gentes e instituciones que no dudan en laminar los derechos elementales de todas y todos en favor de los lobbys de presión que trabajan por una sociedad más triste e injusta.