“Delante de los verdaderos responsables de la crisis –ha destacado CNT-, Azkuna ha mostrado, una vez más, su verdadero rostro: no sólo se erige en policía de los empresarios, sino que arremete contra los pequeños comerciantes, a quienes acusa de no estar dispuestos a trabajar de sol a sol”. A su criterio, el alcalde de Bilbao “quiere esclavos fáciles de domar, y el que se niegue merece morirse de hambre”.
La organización anarcosindicalista considera que al alcalde “le gustaría que todos los comercios de esta ciudad abran domingos y festivos. Quizás también le moleste la jornada de ocho horas, y posiblemente preferiría que los empresarios tuvieran más ‘mano ancha’ a la hora de despedir”. “Por lo visto, la reforma laboral del PP le viene al alcalde bilbaíno como anillo al dedo”, ha destacado.
Asimismo, CNT ha subrayado que “en otro arrebato de sinceridad, el alcalde nos enseña su cara más xenófoba. Tras poblar de cámaras el barrio de San Francisco, ahora carga contra la comunidad china”. “Aunque parezca increible tener que aclararlo a esta altura de la historia, los enemigos de la clase trabajadora no son las personas inmigrantes”, ha señalado CNT.