29/12/2021

Philosophia: Filosofando a martillazos con la Verdad

Escrito por Kimalbertos

Plantear preguntas aquí con el martillo y, quizás, oír como respuesta aquel famoso sonido hueco que habla de entrañas flatulentas …..

El crepúsculo de los ídolos o como se filosofa con el martillo

Prefacio

Friedrich Nietzsche

 

Soy un currela, sin estudios, sin futuro, y con un presente inquietante. Lo que en la ciencia política es dado en llamar “lumpen proletariado”, el estrato más bajo de la sociedad, aquel que nutre, normalmente, los cuadros de choque del fascismo. Y todo ello, porque se supone que somos lo más bajo de la sociedad, lo más degradado, y, por lo tanto, lo más fácil de pervertir y manipular. Pero esa perspectiva, desde abajo en la escala social, permite una visión única, privilegiada, y lo peor, y lo mejor de este mundo queda al descubierto, sin trampa ni cartón. Todo ello, y otras circunstancias personales me ayudaron a descubrir la filosofía como herramienta de comprensión, análisis y defensa ante una realidad caótica y peligrosa para nuestra Libertad. Y esa filosofía sólo podía ser útil, en su acepción etimológica de "amor a la sabiduría" u "amor a la verdad". Porque pronto descubrí, gracias a mi padre, a como pulir, limpiar y asear de mentiras, la Verdad escondida, siempre palpitante.

Pero no la filosofía simplona que se da en los medios de comunicación, o de control social, como se quiera decir. Si no, la filosofía que es el martillo que no actúa violentamente, que esculpe, modela con su análisis en la basta piedra de la sociedad, martilleando sobre la Verdad, para destrozar las mentiras, los bulos y todas las falsedades elaboradas por el Poder. Y dejar, al descubierto, la Verdad desnuda, sin adorno ni artificio. Pero, no sólo la Verdad a descubrir, sino la Verdad a construir, la acción revolucionaria que haga germinar la nueva sociedad, que debe surgir de las ruinas de una Sociedad Tecno-industrial, con tendencias claras al colapso. Y por eso debemos amar la Verdad, sea cual sea, porque es nuestra mejor herramienta contra el Poder, siempre sustentado en la mentira.

Y aquí es donde se constata que la construcción de esta sociedad sobre capas y capas de mentiras se refuerza con el intento por parte del Estado de eliminar de los estudios de secundaria a la propia filosofía, no sea que los jóvenes se pongan a pensar, y no se dejen engañar. En esa construcción nihilista del “todo vale”, es necesario negar a las personas la propia existencia de la Verdad, como algo objetivo y racional, asequible al entendimiento de todos nosotros. Ahí el izquierdismo más progresista, es cómplice, sin querer, con muy buenas intenciones, y el corazoncito bondadoso, de quien dice sin pestañear “no existe la verdad absoluta”, “todo es relativo”, y demás tópicos, que acaban ayudando a poder colar cada mentira, cada falsedad, con la utilidad coyuntural de cada momento, sin que la resistencia, el escepticismo funcionen de forma efectiva. Se crea un efecto de avalancha, con todos los bulos, las "fake news", las verdades a medias y las mentiras disfrazadas con datos, a veces, más o menos ciertos buscando la parálisis social, y que los individuos huyan del espacio público, hartos de un ambiente político asfixiante, agresivo, hostil

Como ejemplo, aquí deberíamos poner que el auge de la ultraderecha, no cumple la función destructora del parlamentarismo que le atribuye una izquierda temerosa de que vuelva un terror franquista, cuando lo que está logrando es que todas las imposiciones neoliberales de la UE desde la Comisión, en Bruselas, administradas por el gobierno pseudoizquierdista de Madrid, se acepten sin oposición, con el mecanismo de alivio, el resoplido de "¡¡¡Pufff!!!, menos mal que no son los fachas, cumpliendo con su papel de fantoche abracadabrante, construyendo una simulación de lucha, y enfrentamiento en una de las escenas de la Sociedad del Espectáculo.

En este ambiente contaminado por un debate político delirante, la indiferencia y la crueldad se manifiestan como maniobras de distracción de las decisiones políticas que realmente importan. Seguimos atendiendo a cuestiones menores de la política, mientras las decisiones importantes, en la UE, se siguen tomando fuera de la actualidad política. Otra verdad escondida detrás de toda la basura mediateca. Y somos nosotros, y únicamente nosotros quienes tengamos que descubrir, entre todos, que es lo importante, y no lo accesorio, o irrelevante. Cuál es la verdad escondida.

En ese sentido, la historia política del siglo XX y XXI se manifiesta con unos jalones que han condicionado el crecimiento acelerado del poder político de los Estados, a niveles cada vez mayores, coherente con una globalización económica, política, y la fusión del Estado y el Capital. Esos jalones son, de momento:

 

- Crack del 29, extendido por Occidente, y que facilitó el ascenso del fascismo (totalitarismo)

- La segunda guerra mundial, que, a pesar de todos los crímenes, sirvió principalmente para la liquidación del movimiento obrero más fuerte, radical y combativo que haya existido nunca.

- Posteriormente, la Guerra fría como forma de control social, con el discurso anticomunista.

- En 1989, la caída del muro de Berlín, del Imperio Soviético, planteó el fin de la historia, con un sólo bloque hegemónico globalizado, y la progresiva desaparición de una oposición realmente combativa.

- En 2001 (2011) el terrorismo espectacular como excusa y argumento para los mayores niveles de control sociopolítico de la historia

- La pandemia actual, que ha mostrado un nuevo enemigo de la Sociedad inhumano, silente y letal, y que establece incógnitas sobre cuál va a ser el nuevo modelo para imponer, con el nuevo y añadido control sociopolítico-sanitario para impulsarlo.

 

En este momento de la Historia, una lectura reciente de un artículo de un hombre de izquierdas latinoamericano, que ahora no consigo ubicar, mostraba su sorpresa porque hoy en día no se planteara un proyecto revolucionario global, como fue la primera internacional en 1864, cuando le parecía más urgente, necesario y revolucionario que nunca. Conecté emocionalmente con, él, aunque ideológicamente no estuviera cerca, porque yo coincidía con él en esa necesidad. Ahora mismo, nuestra mayor debilidad es la carencia de un proyecto global, que aúne las miles y miles de luchas que, a escala planetaria, se están dando, sin que haya un proyecto holístico, integral que responda a la globalización, sin intentar imitarla. Y no, planteo, desde, luego establecer una nueva internacional (¿otra más?), pero sí que el espacio y los niveles de lucha han crecido desde esa primera internacional, y que la lucha local y global se fusionen, es una necesidad, y no una opción. Y que debemos plantear esa lucha global, adaptada a esta sociedad, donde todos los días, como mínimo se conectan a Internet 1300 millones de personas. Y no digo que esto sea bueno, sino que esto es lo que hay, para tenerlo en consideración, por la cuenta que nos trae.

Con todo esto, estamos en este mundo, en un Sistema de Dominación, híbrido entre "1984" y "Un mundo feliz", cuya dinámica nos aboca, inevitablemente, a un colapso económico, ecológico, energético, y para que el Sistema de Dominación pueda sobrevivir, debemos ser sometidos a un nuevo tipo de esclavitud administrativa a nivel planetario, partiendo de las medidas para frenar la pandemia. Unas medidas, cuyo origen incierto, están con un marco de buenas intenciones de un Estado, en apariencia paternalista. Consecuentemente, la lucha por la Libertad será una lucha por la Razón, la inteligencia, la Verdad contra las mentiras del Sistema, una lucha sin tregua.

Y aquí, en estas circunstancias, la lucha se plantea a un nivel nuevo, que nunca, en la Historia de la humanidad había sucedido. El planeta está ocupado por un Sistema artificial, que no permite un espacio natural o artificial fuera del control de la Autoridad del Estado.

En esta situación, nuestra naturaleza como animales, como seres humanos que somos, genera una serie de instintos dentro de nosotros, como respuesta a los acontecimientos de entorno. Uno de ellos, se manifiesta cuando aparece un peligro evidente, un peligro violento, y nuestro instinto primario se manifiesta de dos formas: Huida o lucha. Pero como el Sistema ha colonizado todo el planeta, la huida se ha convertido en una entelequia. Y como ya no hay donde huir sólo queda la lucha sin cuartel. Una lucha global, en el que todos los niveles y áreas del Sistema deben, inevitablemente, ser cuestionados, y por lo tanto, las luchas ya son inevitables e inapelables.

Y por eso, y por todo lo dicho, asumimos cómo se dijo, hace años

revolución o muerte